Columna En la Mira
El reparto de las 27 Comisiones Permanentes en el Congreso del Estado dejó varias lecturas, pero lo que más ruido generó fue que Morena le cedió al PRI la presidencia de la Comisión de Fiscalización, que es una de las más importantes.
¿Por qué es importante la Comisión de Fiscalización?, porque en ella recae el trabajo de revisión y análisis de las cuentas públicas, y el responsable de esta labor será Sergio Mario Arredondo Salas, quien tendrá en sus manos fiscalizar el manejo de los recursos públicos de su exjefe, el gobernador Quirino Ordaz Coppel; y también la de Cobaes, de donde fue su director durante casi toda esta administración estatal.
Hay que recordar que en esta comisión, los morenistas, encabezados por el diputado Marco Antonio Zazueta Zazueta, emprendieron una fuerte campaña en contra de Quirino Ordaz y de la auditora superior del Estado, Emma Guadalupe Félix Rivera, a quien intentaron remover de su cargo, pero soportó el vendaval durante tres años.
Llama fuertemente la atención que Morena haya cedido la presidencia, y bajado a secretario general a Marco Zazueta, aunque los aliados Morena-PAS tienen la mayoría, para cuando se trate de aprobar un dictamen; por lo que presidir esta comisión prácticamente sería de membrete.
El morenista Zazueta Zazueta pretendía ser el auditor superior del Estado, en sustitución de Emma Félix, pero no contaba con que su afiliación partidista y la candidatura que había ganado en 2018, sería un impedimento legal para cumplir con su objetivo. Ante este intento fallido, había acordado con sus líderes -que ahora sí los hay en Morena- que repetiría como presidente de la Comisión de Fiscalización, pero no contaba con el gran acuerdo externo que se tomó en el tercer piso del Palacio de Gobierno.
¿Cuál es ese acuerdo?, ¿Quiénes participaron en ese acuerdo?, las respuestas están bastantes claras, así como el objetivo que se pretende lograr.
Al darle la presidencia de la Comisión de Fiscalización a Sergio Mario Arredondo, sólo basta seguir la línea familiar que tiene. El diputado priista es un académico, quien estuvo vinculado al inicio de su carrera con Jesús Vizcarra Calderón, posteriormente emparentó con el ex gobernador Jesús Aguilar Padilla, al casarse con su hija Iris Aguilar Camacho. Luego formó parte del Gobierno de Quirino Ordaz Coppel, como director de Cobaes, hasta hace una semana, cuando dejó el cargo para rendir protesta como legislador.
Entonces, al analizar esta línea profesional y familiar de Arredondo Salas; y la cercana relación que hay entre Vizcarra-Aguilar-Quirino, con el gobernador electo, Rubén Rocha Moya; se deduce un claro pacto entre estos personajes, para la protección de Ordaz Coppel, una vez que deje el cargo y se vaya a España a cumplir su encargo como embajador de México.
Entonces bien, Quirino Ordaz amarró protección por todos lados. Cobijado por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, con la investidura de embajador; con Rubén Rocha quien ya declaró públicamente que no lo investigará; y ahora en el Congreso del Estado, protegido por un exfuncionario de su administración.
Si la facultad de investigar y fiscalizar las finanzas del Gobierno del Estado recae en el Poder Legislativo, por medio de la Comisión de Fiscalización, presidida por un priista, estará en manos del PRI, el proceder en contra de Quirino Ordaz y sus funcionarios, en caso de encontrar desvíos de recursos; y en la Auditoría Superior del Estado, cuya auditora sigue firme para cumplir con su periodo para el cual fue electo por el Congreso local.
No todos los diputados quedaron contentos con el reparto de las comisiones, la priista Gloria Himelda Félix Nieblas manifestó su inconformidad porque las comisiones de Hacienda, Fiscalización y Puntos Constitucionales, no son presididas por mujeres.
Esta inconformidad inició un debate con el diputado de Morena, Pedro Villegas Lobo, quien le dijo que está frustrada porque a ella no la eligieron para presidir ninguna comisión; y le pidió que hable con el coordinador de la bancada del PRI, Ricardo Madrid, quien decidió darle la presidencia de la Comisión de Fiscalización a Sergio Mario Arredondo, y no a ella.
Esto generó una respuesta a Félix Nieblas, quien le respondió a Villegas Lobo que, no la limite a expresar una inconformidad, que no es con su grupo parlamentario; y le advirtió que, cuando le vuelva a decir que está frustrada, que lo piense dos veces.
Los panistas también se molestaron por sentir que los hicieron menos en el reparto de las comisiones, por ello, Adolfo Beltrán y Giovanna Morachis, votaron en contra.
Estos acuerdos no dejaron muy contentos a todos los morenistas, pero ahora tienen un líder político, que será gobernador a partir del 1 de noviembre, así que no les queda de otra que disciplinarse.