Columna El Cambalache
Por Estefanía López
En su proceso tardío de renovación de dirigencia, el PRI sigue entre las nubes grises. Ni siquiera se han apresurado por arrancar un nuevo proyecto político luego de la división y resentimientos que provocó la alianza quirinista – rochista.
En esta siguiente etapa de partidos en Sinaloa, por lo menos el PAN llevó a cabo su renovación con Roxana Rubio al frente quien ha salido a los medios a destapar y criticar unas que otras hazañas. Aunque aún le falta, mucho le falta.
Caso MC, con Sergio Torres que desde que cambio la administración estatal se ha dedicado a jugar su papel de oposición, pero ha sido tan eficiente como para ganar un buen capital político.
Mientras tanto, el PRI sigue muerto tras 8 meses postelectorales.
Preocupados ellos, un poquito más por lo que hacen o determinan desde el CEN, que por recuperar el poco capital electoral que les quedó en la elección del 2021. Y hay que decir lo mismo de los que fueron candidatos.
La semana pasada, hubo reunión de mujeres priistas, de esas típicas para la foto con el delegado nacional, Enrique Benítez. En donde todas se ven contentas después de haberse dicho algunas verdades. Como en las redes sociales… fotos vemos, intenciones y sentimientos no sabemos. Algunas tuvieron citas privadas con él, algunas sólo las han solicitado, sin éxito.
Muchas aspiran a la dirigencia estatal, nada que Aarón Irizar, nada que presidente interino, nada de eso, ellas quieren renovación.
Pero la que, sin duda, salió perdiendo fue la diputada local y actual dirigente del PRI Sinaloa, Cinthia Valenzuela.
Liliana Cárdenas, Maty Beltrán, Gaby Inzunza y Paola Garate se fueron de lleno en contra la dirigente quien al parecer cuenta con el respaldo nacional para que termine su periodo como presidente sin que se le imponga un reemplazo.
Que la presidenta no ha hecho nada por el partido, que el partido sigue en stand by mientras Cinthia sigue cómoda en su curul esperando instrucciones del nacional o de su líder político. Que el PRI no está para andar esperando dirigentes que sean de “los mismos”.
Que se necesita renovación profunda, con nuevas caras, pero YA. A lo que Cinthia contestó algo como que… ahora las mujeres se han quejado y opuesto a su dirigencia, pero ninguna de ellas ha ofrecido su mano para ayudarla.
De manera más respetuosa, las exdiputadas Mónica López y Cecilia Moreno externaron su crítica. La ultima ya ha expresado públicamente sus intenciones de dirigir el PRI en Sinaloa. También piden renovación, pero no tuvieron la intención de atacar a la joven y actual dirigente por su “pésimo” trabajo.
Lo que se dice, es que el delegado Enrique Benítez tiene clara instrucción de que, Cinthia debiera cumplir su periodo. Al parecer el dirigente nacional del PRI, Alito Moreno no está muy preocupado por Sinaloa, más bien, sólo le interesa mantener su grupo y capital político y Cinthia lo ayudaría a tener calmadas las aguas. SE SABE.
¿A las mujeres priistas les gusta? NO. Pero habrá que sacar más agallas para que realmente recuperen a su PRI.
Aunque hay que reconocer que prácticamente son las únicas que, aun tienen esperanzas y se han pronunciado por la renovación profunda del partido.
Ahora, si las mujeres son las aventadas para renovar al PRI. ¿Quién sería la indicada? ¿Nubia Ramos, Ana Cecilia Moreno, Paola Gárate o alguna otra mencionada? Habría que probarlo.