La ONU anunció que expertos nucleares dentro de su organismo inspeccionarán la central nuclear de Ucrania aunque los ataques en la zona no se hayan detenido.
Los gobiernos de Putin y de Zelenski aplaudieron la medida, pero ninguno de ellos dejo de acusar al otro de ataques imprudentes en torno a la zona nuclear.
Rafael Grossi, director general del Organismo Internacional de la Energía Atómica, había intentado lograr accesar a la planta de Zaporiyia, la más grande de Europa, la cual actualmente está controlada por los militares rusos pero operada por trabajadores ucranianos.
De nuevo, Ucrania acusó a Rusia de hacer ataques de cohetes a los alrededores de la zona, los cuales pueden causar un accidente nuclear, habiéndose ya desconectado la red eléctrica la semana pasada por impactos cercanos de proyectiles.
“Ha llegado el día”, informó Grossi en Twitter. “La Misión de Apoyo y Asistencia (…) está ya de camino”.
“Debemos proteger la seguridad de la instalación nuclear más grande de Ucrania y Europa”.