Ya se comienza a sentir lo fresco en las mañanas por lo que muchos ya preparan su cafesito para iniciar su día con el mejor de los ánimos, sea negro, con azúcar, o con leche, esta bebida es la gran compañera de muchos para comenzar su jornada.
Por esto mismo, los expertos han advertido que tengas cuidado con lo que le pongas a tu café, dado que solo con agua caliente no representa ningún problema, pero si lo mezclas con algo más, las cosas no podrían ir tan bien.
A la hora de prepararte tu bebida, sea con azúcar, canela, leche o piloncillo, en el transcurso de las horas esto podría dañar tu salud, dado que estos componentes se echan a perder, causando malestar.
Luis Riera, experto en seguridad alimentaria y director de la Consultoría en Seguridad Alimentaria SAIA nos advierte que en nuestra boca y nariz se almacena u sin fin de bacterias, las cuales se van a la taza de café una vez bebemos de ella.
“No debemos preocuparnos cuando el contenido es café negro sin azúcar. Este no es más que una infusión sin prácticamente proteínas, por tanto, con nulo alimento para las bacterias. Si acabada la bebida volvemos a rellenar la taza sin haberla lavado, el líquido hirviendo del nuevo café acabará con cualquier microorganismo que haya podido adherirse”, comenta Riera.
“El problema aparece cuando, además de café, nuestra taza incorpora leche, un alimento rico en nutrientes, especialmente en proteínas, al que bajamos de temperatura al calentarlo».