López Obrador comentó que ya está preparando dos nuevas iniciativas de reforma, una para que la defraudación fiscal sea considerada un delito grave, otra para evitar que los funcionarios busquen amparo.
La aprobación dependerá de los legisladores en el Congreso, donde la 4T no tiene la mayoría necesaria para pasarlas.
Además, AMLO se pronunció contra la defraudación fiscal.
“Y también lo que sucedió en la Corte, de que se dio protección a defraudadores fiscales, a factureros, a delincuentes de cuello blanco, tiene que ir también al Congreso de nuevo”, aseguró.
Antes de que concluya su mandato, López Obrador enviará “la iniciativa de austeridad republicana porque no puede ser que con amparos, con triquiñuelas legaloides, estén ganando más que lo que gana el presidente, muchos de estos defensores del INE y del régimen de corrupción; y si el congreso dice no, ese ya es otro problema, pero yo voy a cumplir”.