La selección de futbol de Argentina fue protangonista de un masivo desfile en Buenos Aires, capital de dicho país, luego de tener que cambiar varias veces su itinerario por la congestión de las personas que vitoreaban la victoria de su equipo en una celebración que congregó a 5 millones de fanáticos.
Debido a tal masiva reunión, los jugadores tuvieron que ser ultimadamente transportados en un helicóptero.
La selección salió a las 8:30 am del recinto deportivo de la Asociación del Fútbol Argentino, y tras 3 horas, el autobús solo había recorrido 13 kilómetros de carretera por la presencia de gente.
Luego de las interrupciones, finalmente se dio a conocer que los deportistas llegarían hasta Buenos Aires por helicóptero.