El régimen Norcoreano cuenta con una fila de sanciones impuestas por la ONU por la continua violación a los acuerdos sobre la producción de armas nucleares de la dinastía Kim.
Debido a la prueba reciente de un misil submarino nuclear, se se violó la resolución 2397 del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas.
Dicha medida dicta “nuevas sanciones severas para los sectores de energía, exportaciones e importaciones de Corea del Norte, además de nuevas autoridades marítimas que contribuirán a bloquear las actividades de contrabando ilegal de ese país”.
Debido a esto habrá “reducción sobre el tope anual establecido (…) sobre exportaciones de petróleo refinado en un 75%, para permitir el envío de un máximo de 500.000 barriles por año hacia Corea del Norte”.
Sumado a esto, según el medio británico Financial Times junto con expertos del Royal United Services Institute, se reveló un esquema donde grupos de empresarios del este de Asia, junto con la ayuda del crimen organizado, entregan de forma ilegal cientos de miles de barriles de petróleo a Corea del Sur, con lo cual se financia el programa nuclear que la ONU sanciona.
Unica, un barco petrolero, es uno de los tres vehículos extranjeros de este tipo que aun navegan directamente a Norcorea, y ha realizado por lo menos 23 viajes al país o su territorio comercial desde el 2019.