La Organización Mundial de la Salud anunció que la propagación del Covid seguirá siendo considerada una emergencia sanitaria.
«No es el momento de bajar la guardia», afirmó la OMS respecto a dicho decisión dado que varios países siguen tomando medidas para futuros contagios y futuras olas.
El director general de la organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo que el Comité de Emergencias de la OMS, fue quien recomendó no bajar la alerta dado que el virus sigue propagándose de forma intensa a comparación de otras enfermedades, ala vez que su evolución es impredecible.
«No podemos dejar de vacunar, este es el mensaje que el Comité considera útil enviar a los ciudadanos y gobiernos», señaló Didier Houssin, presidente del Comité de Emergencia de la OMS.
El presidente del Comité de Emergencia de la OMS, Didier Houssin, sostuvo que «no ha llegado el momento de relajarse con respecto a este virus», ni de perder de vista la importancia de seguir haciendo pruebas de diagnóstico.
Sobre las condiciones para que el Covid-19 deje de estar en el nivel máximo de alerta sanitaria, explicó que deben confluir distintos criterios, entre ellos epidemiológicos y otros relacionados con impacto del coronavirus en los lugares donde la transmisión se mantiene alta.
«Es erróneo creer que menos cantidad de casos quiere decir que hay menos riesgo. Nos alegramos que hayan menos muertes, pero este virus nos ha sorprendido en el pasado, así que tenemos que seguirle la pista todo el tiempo», señaló el director de Emergencias Sanitarias de la OMS, Mike Ryan.
Las muertes reportadas en la última semana por Covid-19 en el mundo ha sido la más baja desde que empezó la pandemia.
Sobre las últimas subvariantes descubiertas de ómicron (denominadas BA.4 Y BA.5), la directora técnica para la covid-19 en la OMS, Maria Van Kherkove, confirmó que se han detectado en un número limitado de países de África y Europa, y ahora se está analizando si presentan algún cambio significativo con respecto a la variante original.
Confirmó que por el momento no se han detectado cambios en la gravedad de la enfermedad o en la defensa que ofrecen las vacunas, pero también reconocido que es prematuro sacar conclusiones porque el número de secuencias genéticas realizadas es bajo.